El peligro de una guerra nuclear es real; el proceso de desarrollo mundial es real. Organiza para la conferencia de prensa de emergencia del 12 de junio

9 de junio de 2024 (EIRNS) — Dos grupos diferentes de mandatarios importantes se manifestaron esta semana con sendos mensajes completamente opuestos. Uno de estos, desde Francia, el Presidente Emmanuel Macron y el Presidente de Estados Unidos Joe Biden, en una visita de Estado, se burlan de la ocasión del 80 aniversario del Día D; anunciaron un mayor respaldo militar a Ucrania «para detener a Rusia”. Ambos mandatarios se reunieron con el Presidente de Ucrania, Zelenski, quien preside un regimen neonazi y a quien se permitió hablar ante la Asamblea Nacional francesa. Macron reiteró su intención de proporcionar aviones de combate y entrenamiento in situ en Ucrania. Biden anunció un nuevo envío de armas a Ucrania por valor de $225 millones de dólares. 

En sentido contrario, los mandatarios de Rusia y China, anunciaron nuevos compromisos económicos con múltiples naciones de la Mayoría Global para proyectos notables para el desarrollo. Ayer concluyó el Foro Económico Internacional de San Petersburgo (FEISP), tras cuatro días de deliberación entre unas 21.000 personas de 139 naciones. El valor total estimado de los 980 acuerdos alcanzados asciende al equivalente de más de $70.000 millones de dólares (aunque el dólar no está incluido en muchos de esos acuerdos), muchos de los cuales, al margen del valor monetario, son transformadores. Paralelamente, la semana pasada se realizaron en Pekín reuniones especiales sobre la Iniciativa de la Franja y la Ruta. Consideremos algunos de los nuevos proyectos anunciados, por continentes: 

África. En el FEISP de esta semana, la nación africana occidental de Guinea firmó un memorando de entendimiento con la empresa rusa de energía nuclear Rosatom, para colaborar en el estacionamiento de unidades flotantes de centrales nucleares (FNPP) en su costa, cuya electricidad puede elevar a sus 14 millones de habitantes a una nueva y más alta plataforma de vida. 

Asia. El 6 de junio se firmó en Pekín el acuerdo sobre el ferrocarril China-Kirguistán-Uzbekistán, largamente discutido y finalmente acordado, que proporcionará un nuevo grado de interconectividad, no sólo a China y Asia Central, sino también de Asia Central al sudoeste asiático, África y Europa. Los Presidentes de los tres países asistieron a la firma del acuerdo por vídeo en directo, y cada uno de ellos describió a continuación los nuevos horizontes que se abren ante todos ellos. El Presidente de Uzbekistán, Sadyr Japarov, declaró que el nuevo ferrocarril dará servicio a 4.000 millones de personas y llegará al suroeste de Asia, Europa y África. El Presidente Xi Jinping lo calificó de proyecto emblemático de la Iniciativa de la Franja y la Ruta. 

Sudamérica. En Pekín, uno de los miembros ministeriales de la delegación brasileña que asistió a la Comisión de Cooperación Sino-Brasileña de Alto Nivel, planteó la visión de un ferrocarril transcontinental para conectar finalmente, por tierra, los océanos Pacífico y Atlántico. Podría esperarse más información al respecto en noviembre, cuando los mandatarios de Brasil y Chile se reúnan al margen de la cumbre del G20 organizado por Brasil. 

Durante el FEISP, el Presidente de Bolivia, Luis Arce, cerró numerosos acuerdos nuevos para su país, especialmente en el ámbito de la energía nuclear. Resumió las perspectivas del nuevo espíritu de desarrollo, en su entrevista con la cadena rusa de noticias RT: «Estamos convencidos de que el multilateralismo es el camino, y que inexorablemente será el destino que seguirá el planeta». 

Estas actualizaciones en su conjunto, el empuje militarista de la casta política dominante en Occidente y de la OTAN global, por un lado, y el impulso hacia el desarrollo del mundo no perteneciente a la OTAN, por el otro, nos sitúan al borde de un peligro sin precedentes, al mismo tiempo que estamos en el umbral de lo que puede ser un avance espectacular para toda la humanidad. El núcleo de Occidente, el mundo transatlántico, está en quiebra económica y financiera. La reacción sensata de sus líderes sería romper con las políticas de colapso y, más bien, unirse a la Mayoría Global en el desarrollo. Todas las crisis actuales pueden resolverse. 

Esta es la perspectiva de la conferencia internacional que se realizará el próximo fin de semana, 15 y 16 de junio, auspiciada por el Instituto Schiller y titulada «El mundo al borde del abismo: Por una nueva paz de Westfalia«. 

Mientras tanto, el peligro se agrava a cada momento, con una escalada de los conflictos hacia la Tercera Guerra Mundial. Ayer, mientras Biden estaba en Francia, el régimen neonazi de Ucrania disparó cinco misiles ATACMS estadounidenses contra objetivos civiles de la República Popular de Lugansk, que es una entidad territorial de la Federación Rusa desde finales de 2022. ¿Qué ocurrirá mañana? 

Este es el momento de alzar la voz contra esta locura. Debe detenerse. El enemigo está expuesto y es vulnerable, aunque intente acallar las voces de la razón. El 3 de junio, el Departamento de Estado de Estados Unidos confiscó el pasaporte de Scott Ritter, experto en armas de destrucción masiva y un destacado portavoz estadounidense contra la guerra, y le impidió embarcar en un avión de camino al FEISP en San Petersburgo. El 6 de junio, la llamada red «antidesinformación» de la OTAN, con sede en Ucrania, con financiamiento y dirección de la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID) del Departamento de Estado, publicó otra lista negra de individuos objetivos de “eliminación”. 

La «ONG» ucraniana, Texty Data Journalism Agency, publicó una lista de enemigos del régimen de Kiev, con 390 estadounidenses y 76 organizaciones (todas menos un puñado de ellas también estadounidenses) acusados de «hacerse eco de la propaganda rusa» y de «contribuir a la discordancia política en el seno de la toma de decisiones”. ¿Cómo? Pidiendo que se ponga fin a la locura del incesante apoyo estadounidense a la utilización de Ucrania para librar una guerra contra Rusia. 

Scott Ritter, Helga Zepp-LaRouche, líder del Instituto Schiller, y otros hablarán en una conferencia de prensa de emergencia el 12 de junio, de 1 a 3 pm (EDT) (en persona y por Internet en vivo) en el Club Nacional de Prensa de Washington, DC. Habla. Corra la voz por todos los medios. El acto se titula «El peligro de una guerra nuclear es real y hay que detenerlo».

Foto: https://eir.news/2024/06/daily-brief/eir-daily-news-tuesday-june-11-2024/

«…demuestran que la visión de la paz de JFK es correcta. «Ningún problema del destino humano está más allá de los seres humanos. La razón y el espíritu del hombre han resuelto a menudo lo aparentemente irresoluble, y creemos que pueden hacerlo de nuevo.»

Para mayor información escriba a Instituto Schiller Perú: luchova2003@yahoo.es

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